Tuesday, November 27, 2007

las reglas de bill gates para la vida real

En una universidad americana, hace un tiempo Bill Gates dictó una conferencia dirigida a estudiantes y padres de familia sobre protectores (con unos hijos muy consentidos que sienten que todo lo merecen).
Allí expuso 11 reglas que aunque duras son necesarias en la vida real.

Esas reglas son:

Regla Uno- La vida no es justa, acostúmbrate a ello.

Regla Dos- Al mundo no le importa tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo.

Regla Tres- No ganarás US$ 5.000 mensuales justo después de haber salido de la preparatoria y no serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te hayas ganado ambos logros.

Regla Cuatro- Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.

Regla Cinco- Dedicarse a voltear hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: lo llamaban oportunidad.

Regla Seis- Si metes la pata no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por tus errores; aprende de ellos.

Regla Siete- Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación.

Regla Ocho- En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores, pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Esto no ocurre en la vida real.

Regla Nueve- La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.

Regla Diez- La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar.

Regla Once- Sé amable con los "nerds" (los estudiantes más aplicados de tu clase). Hay muchas probabilidades de que termines trabajando para uno de ellos.

Tuesday, November 06, 2007

el universo está cargado de abundancia

El universo está cargado de abundancia.
La vida está llena de abundancia.
Mientras vas al trabajo cada mañana y permaneces ocupado intentando (mal) ganarte la vida, la abundancia está a tu alrededor. Muchos la pasan por alto; pocos la reconocen.
La mejor vida consiste en poner algo en la vida en vez de estar preocupado de la forma de sacarle algo.
Cuando das, atraes. Cuando sueltas, te abres a recibir. La vida te devolverá lo que le des. Si das poco, recibes poco. Si das mucho, recibes en consecuencia. Todo lo que sembremos, eso vamos a cosechar. Cuida que tu semilla sea abundante para que tu cosecha sea igualmente abundante.
Nunca olvides esto: eres un notable portador de semillas. Nunca existirá el día que no tengas absolutamente nada para sembrar.
Si quieres activar abundancia, debes soltar la semilla que está en tus manos.
Debes ofrecer aquello que más deseas que te sea devuelto. Puede ser dinero, tiempo, recursos, enseñanza, motivación.
Entiende esto: no estás en esta tierra para ganarte la vida, sino para diseñar tu potencial.
El peor error que puedes cometer es buscar un empleo para ganarte la vida.
Muchos viven la vida como empleados. Pocos se atreven a vivir la vida de sus sueños.
Mientras malgastas tu vida en un empleo, nunca experimentarás la abundancia que está a tu alrededor. Ella vendrá hacia ti si la respetas, y la mejor forma de respetar la abundancia es abrirte a ella con un corazón agradecido.
La gratitud es la llave maestra a la dimensión de la abundancia.
Cuando agradeces, no estás dando por sentado lo bueno que te ocurre o llega a tu vida. Crees que cada cosa es un milagro, y como lo crees te abres al flujo de lo milagroso.