La vida se resuelve hacia arriba

La vida se resuelve hacia arriba, no hacia adelante.

Antes de ser líder de tu futuro, tienes que ser líder de tu mente.

Tienes que ejercer control de calidad de tus pensamientos antes de ejercer control de calidad de tus caminos.

No basta con ir hacia adelante. Tienes que saber con qué herramientas vas a ir.

La vida exige una caja de herramientas que te provea inteligencia contextual. Si no sabes leer tu entorno, no sabrás qué camino seguir.

Recuerda esto: la vida te exige crecer, no apurarte. Los desafíos retan tu aplomo. La conquista externa es primero una conquista interior.

Cada día elige apuntar hacia lo alto. Esta elección impactará el resto de tu día.

Nuestra agenda debe ser vertical antes que horizontal.

No esperes nada de nadie

La vida es más fácil cuando no esperas nada de nadie.

La mayoría de nuestras frustraciones  y decepciones tienen un sello: esperamos algo de los demás.

Es crítico que entiendas que nadie puede dar lo que no tiene, y nadie tiene lo que no se le ha impartido.

Deja de poner tus expectativas en las personas. Por duro que te parezca, nadie te debe nada.

Aprende a esperar todo de ti, y cada cosa que alguien te dé, aún el más insignificante de los gestos, considéralo un regalo.

Alguna vez leí que debemos aprender a ser felices con los demás, sin los demás y a pesar de los demás. En otras palabras, tu dicha no depende de las personas que te rodean. Solo depende de tu decisión de serlo.

construye dentro de ti

Una vida plena depende de la amplitud de tu interior.

Una vida extraordinaria comienza desde adentro, no en las cosas que tienes o en la ropa que usas.

Sutilmente, muchas personas se rodean de cosas. Eso solo refleja la pobreza de su mundo interior.

Somos más de adentro que de afuera. Nuestra primera conquista y la más importante es interna.

El problema es que vivimos hacia afuera, a veces subyugados a lo exterior.

Somos como un iceberg. Lo que se ve apenas es significativo comparado con lo que no se ve.

Nuestros cimientos son internos, nuestro futuro está dentro de nosotros.

Myles Munroe subrayó: “El hombre que no tiene vida interna, es esclavo de sus alrededores”.

En cuanto a ti, debes convencerte que lo que eres es más grande que lo que tienes.

Deja que Dios cave profundo en ti. Deja que lo que portas sea más grande que lo que exportas.

José Martí lo expresó magistralmente: “Quien tiene mucho dentro, necesita poco fuera”.

No intentes construir algo grande fuera de ti, sin construir algo grande dentro de ti.

piensa en grande

Piensa en grande y serás del tamaño de tus pensamientos.

Piensa en pequeño y te empequeñecerás hasta desaparecer.

Es crítico que entiendas lo que Donald Trump enfatizó cierta vez: “Si de todas formas vamos a pensar, ¿por qué no hacerlo en grande?

Mi pregunta es: ¿Cuál es nuestro temor más insondable?

Probablemente, como lo expresara en uno de sus poemas Marianne Williamson: “Es nuestra luz, y no nuestras sombras, lo que nos atemoriza”. Es nuestra grandeza la que nos hace encogernos.

Nos encogemos cuando pensamos en límites, sin darnos cuenta que lo que hacemos es crearlos.

Nos encogemos pensando pobremente de nosotros, sin haber exigido a nuestra potencial.

Nos encogemos frente a la opinión y crítica de gente que nunca conquistó nada.

Por eso, si aspiras a volar como águila, evita rodearte de gallinas.

Benjamin Disraeli fue concluyente al expresar: "Alimenta grandes pensamientos, pues nunca llegarás más alto que tus pensamientos".

cambia tu realidad

Para cambiar tu realidad debes:

Ø  Cambiar tu declaración

Ø  Cambiar tu confesión

Ø  Cambiar tu visualización

Ø  Cambiar tu enfoque

Ø  Cambiar tu actitud

Ø  Cambiar tu entorno

Ø  Cambiar tus relaciones

Ø  Cambiar tu siembra 

la retirada es imposible

“A partir de cierto punto no hay retorno. Ese es el punto que hay que alcanzar”, escribió Franz Kafka.

El punto de no retorno es ese punto en el camino a partir del cual volver atrás deja de ser una opción frente a la de seguir adelante.

Considero que muy pocas personas llegan a ese punto, más aún en la era del

facilismo en el que vivimos. Sin embargo, si queremos conquistar, emprender, abrir un camino diferente para nuestras vidas, no hay otra vía que comprometerse con aquello que visionamos.

Hernán Cortés lo hizo. Inutilizó sus naves, barrenándolas. Su mensaje era claro: la retirada es imposible.

“La retirada es imposible”, señores. No hay escapatoria cuando nuestro futuro nos demanda o cuando una causa nos exige. Los soldados que se alistan en las filas de un ejército lo saben.

Se cuenta que Alejandro Magno hizo quemar las naves de sus hombres.  “La única posibilidad de volver a casa”, expresó entonces, “es en las naves de nuestros enemigos”.

Me pasa a menudo que veo personas hermosas, con tremendo potencial, titubeantes, manejando cientos de opciones, pero permaneciendo en sus zonas de comodidad.

Nunca permitas que esto te acontezca. Quema tu combustible, inutiliza tus naves, pero ve por aquello que arde en tu corazón.

Es más tarde de lo que piensas.

la centralidad del éxito

“El éxito es saber cuánta gente vive mejor gracias a que tú existes”, leí alguna vez.

Me parece que esta cita supera a muchas que he recogido sobre el éxito, pues centra su enfoque en el impacto sobre los demás.

Recuerda esto: tu realización personal depende del alcance de tu contribución. Tú puedes conseguir muchos resultados, pero sin afectar positivamente la vida de otras personas, tu éxito es sólo parcial.

Sí, estoy de acuerdo que el éxito no es un destino, sino un viaje. Sin embargo, lo que mide el alcance de ese viaje es lo que haces por los demás.

Ahora quiero preguntarte: ¿cuánta gente vive mejor gracias a que tú existes?

Kalidasa, poeta indio, fue magistralmente profundo al expresar: “Los grandes espíritus son como las nubes: recogen para derramarse”.